Tu router y tú: Una buena relación que evita los problemas de conexión wifi en casa

En el contexto de la pandemia actual, la necesidad de utilizar los dispositivos en casa es definitiva.
Fue un golpe para muchos descubrir que la relación que tenían con sus routers en casa no era la mejor: Señal débil, cortes reiterado y lugares a específicos a donde llega. Como en toda relación, los detalles simples y elegir correctamente e es la solución para conseguir la conexión deseada.
Tenerte cerca es mejor
Mantenlo lo mas cerca de tuyo posible porque las redes wifi están basadas en una tecnología distinta, la de radio, por tanto mantén tu router lo más cerca posible de los dispositivos que quieres usar.
Un truco para ti
Coloca la antena en perpendicular (y no “apuntando” al dispositivo) para que esa onda de señal que se forma le llegue de forma óptima. Colócalo en un lugar a la vista y un lugar alto.
Quita los obstáculos
Las frecuencias electromagnéticas tienen otro problema: cualquier obstáculo físico daña su alcance y fuerza: El suelo, el techo o las paredes de la casa. Mantén tu router lo más expuesto posible, evitando encerrarlo.
Evita a los terceros
Se trata de elementos que son emisores de otras frecuencias por sí mismos como, por ejemplo, los hornos de microondas o incluso los televisores que funcionan con frecuencias similares. También las superficies metálicas que reflejan las ondas de las señales Wi-Fi también suelen perjudicar la calidad de la conexión.
Y los vecinos no se quedan atrás, las redes wifi de sus casas también aparecen como un obstáculo. La mayoría de redes Wi-Fi siguen usando la frecuencia de 2,4 GHz en la que existen cierto número de canales. Si todas estas redes, la tuya y la de tus vecinos, están conectados al mismo canal, puede que las señales se superpongan y hagan difícil disfrutar de una conexión estable.
En cambio, las redes de 5 GHz de los routers modernos que soportan el estándar WiFi 802.11ac tienen más canales y ofrecen más opciones al respecto.